Four Seasons Hotel Madrid

Carrera en Four Seasons

• Desde 2020
• Primer cargo en Four Seasons: el actual

Experiencia laboral

• Hotel Ritz Madrid; Mandarin Oriental Hyde Park London; La Terrasse, Mâcot-la-Plagne (Francia); Hotel Villamadrid; NH Alcalá, Madrid; Willerby Manor Hotel (Inglaterra)

Lugar de nacimiento

• Madrid

Formación

• Titulado en Turismo, Universidad Rey Juan Carlos, Madrid

Idiomas

• Alemán, español, francés, inglés

Como jefe de conserjería del Four Seasons Hotel Madrid, Raúl Bermejo podría recomendar una infinidad de auténticas experiencias locales para mostrar a la clientela la verdadera esencia de la ciudad. Sin embargo, prefiere mostrar a cada persona aquella cara de Madrid que realmente quiere descubrir. “Queremos personalizar cada estancia y cada demanda y, para ello, necesitamos conocer bien a la gente”, explica. “Podríamos limitarnos a reservar lo que se nos pide, pero preferimos invitar a la clientela a descubrir aquello que de verdad le interesa y a que lo haga de la manera que más se adapta a sus preferencias. Nuestro objetivo es presentarle sugerencias únicas y revelarle una cara de Madrid que es posible que no conozca”.

¿Por ejemplo? La capital de España es un destino de ensueño para las personas que admiran a Goya, y el Museo del Prado, en concreto, posee una colección impresionante que nadie debería perderse. Con todo, Bermejo no se limita a los museos más populares, sino que, además, recomienda otras opciones que amplían los horizontes de la clientela, como la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, situada justo enfrente del hotel. “Nuestra misión consiste en conseguir que la gente sea consciente de las posibilidades que ofrece una ciudad como Madrid”, comenta. “La mayoría no tiene ni idea de que Goya era miembro de la Academia”.

Un equipo de conserjería de campeonato

Bermejo supervisa uno de los equipos de conserjería más grandes del sector hotelero español: un conjunto de ocho conserjes ofrecen un servicio a la altura de Four Seasons desde detrás del primer mostrador que ven los huéspedes nada más entrar en el hotel. El mostrador es muy dinámico y está equipado con las últimas tecnologías, como iPads con la aplicación de Four Seasons, que están a disposición de todo el mundo para facilitar una conexión directa con la clientela.

La mayor parte de los conserjes del hotel pertenecen a la sección española de Les Clefs d’Or (Las Llaves de Oro), una organización profesional de conserjes de hotel a escala internacional que cuenta con 117 miembros activos en España y 4000 en más de 80 países, los cuales comparten información y se brindan la asistencia necesaria. “Seguimos con convencimiento el lema ‘El servicio a través de la amistad’. Se trata de un recurso muy importante para nosotros”.

Los demás conserjes trabajan con la misma confianza porque ellos, al igual que Bermejo, también han peinado la ciudad. Conocen de primera mano todo lo que recomiendan y, si hay algo que no saben, se esfuerzan por averiguarlo en persona, estableciendo nuevos vínculos y acumulando contactos para garantizar la satisfacción de la clientela durante su estancia en Madrid. “Para ser conserje de hotel, hay que tener un toque excéntrico”, asegura, con sentido del humor. “Siempre que veo algo nuevo, me acerco para descubrir de qué se trata. Siempre estoy buscando cosas que ofrecer a la clientela”.

Bermejo estaba predestinado a trabajar en el sector hotelero desde pequeño. Se crió en Madrid, donde empezó a atisbar lo que quiere decir trabajar sirviendo al público a través de sus padres, que dirigían un restaurante. Gracias a ello, aprendió enseguida que, si bien el producto es importante, “más importante es tratar bien a la gente”.

“Mi afición es mi trabajo”

Después de titularse en Turismo en la Universidad Rey Juan Carlos, Bermejo sacó a pasear sus talentos hasta que consiguió un trabajo en un histórico hotel de cinco estrellas de Madrid. El único puesto que había disponible era el de telefonista. “Me dije: ¡Vamos allá!”. Un mes más tarde pasó a ser conserje y, en un abrir y cerrar de ojos, se enamoró de su trabajo.

“Caí en la cuenta de que estaba ahí para hacer feliz a la gente, y eso era precisamente lo que quería. Tengo algo que mucha gente nunca llega a conseguir: mi afición es mi trabajo”.

¿Todavía necesita la clientela de Four Seasons que los conserjes desempeñen ese trabajo cuando puede acceder a un montón de recomendaciones de viaje a través de un teléfono inteligente? Bermejo contesta que sí y añade que las reseñas de Internet suelen tener un carácter general, que no establecen ninguna conexión emocional (“eso es algo muy importante”), y que el acceso y las experiencias de aquellas personas aleatorias que las escriben pueden variar muchísimo.

“Nosotros queremos crear relaciones especiales con la clientela, de tal forma que, cuando salga a la calle, los contactos de Four Seasons se aseguren de que reciba un buen trato. Eso no te lo da un teléfono inteligente”, explica. “Madrid se reinventa de forma constante, y nosotros siempre estamos al tanto de todo lo que ocurre. La clientela no tiene que preocuparse por buscar qué hacer. Nosotros encontramos la opción ideal para cada persona, de manera que esta solo tenga que pensar en relajarse y disfrutar de la ciudad”.